Han pasado ya tres días desde el partido del Estu del sábado. Aún tengo una sensación de impotencia y rabia importante.
Algunos de vosotros supongo que ya sabéis a qué me refiero, pero para el que no se haya enterado, paso a relatar los hechos.
El sábado por la tarde Peral y yo acudimos al partido de Estudiantes, aunque estuvimos a punto de quedarnos en casa por cierto, y allí vivimos un espectáculo dantesco, algo que a mi parecer era imposible que pasara en los tiempos que corren, pero he comprobado que en algunos sectores de la sociedad la época franquista y sus métodos siguen muy vigentes.
Todo comienza al final del segundo cuarto del partido, la (D)emencia no cabía en el escaso espacio que hay reservado para ellos y muchos tuvieron que colocarse en un pasillo que hay entre la zona baja y la zona alta de nuestro fondo. Peral y yo tampoco tuvimos lugar y tuvimos que colocarnos justo encima de ese pasillo. He de decir que esto viene sucediendo en todos los partidos en el Madrid Arena, ya que como he dicho antes, no cabemos en el espacio que nos dejan.
De repente aparece gominator (Jefe de seguridad del Estu) y empieza a decir que hay que desalojar ese pasillo. Un veterano de la demencia habla con él y le pide por favor dos minutos, que es lo que quedaba de primera mitad, para desalojar, que en el descanso la gente se redistribuiría ya que tampoco querían estar ahí, simplemente no cabían en otro lado. Él dice que de acuerdo y se marcha.
Al rato llegan dos nacionales, que acabarían siendo cinco a los pocos segundos y empiezan a desalojar el pasillo. Uno podría pensar que lo hicieron de buenas maneras, pidiendo por favor que se marcharan de allí, pero yo no estaría aquí escribiendo si hubiera ocurrido de ese modo.
Los nacionales, que por cierto eran antidisturbios, comenzaron a empujar y a sacar a la gente de ahí de muy malas formas, a la fuerza y a gritos. Enseñaban sus escudos de nacionales y decían frases como "Tú te vas de aquí y no te lo vuelvo a repetir" o "Estás viendo esto? sal de aquí o te echo del estadio" mientras señalaba su escudo de madero. Ante tanta delicadeza las cosas se fueron poniendo tensas.
He de decir que la mayoría de chavales que había en ese pasillo eran menores de edad, estudiantes del Ramiro que acuden a los partidos. La gente empezó a gritar que se fueran pero todo empezó a liarse.
Llevo estos días leyendo por todas partes crónicas de lo ocurrido por testigos oculares y de más, a parte de lo que yo mismo vi junto a Peral. Lo poco que se puede sacar en claro, dado lo difícil que era ver lo que ocurría entre tanta movida, es que uno de los maderos desenfundó su porra, sin recibir orden de nadie, y se puso a repartir con violencia. Cogieron a un demente y lo arrastraron por los interiores del estadio escaleras abajo (a partir de aquí está todo grabado, yo lo he visto con mis ojos), el chaval cae al suelo donde se ve su espalda, ya sin camiseta, amoratada por los golpes de los antidisturbios y los escalones. Tiran de él hasta llegar abajo con la intención de meterlo en un cuarto sin cámaras ni acceso permitido al público. Varios dementes que llegaron pronto siguieron a los policías corriendo hasta alcanzarlos justo antes de que pudieran meterle dentro y empezaron a tirar de su compañero hasta liberarle. Lo consiguieron, pero uno de los que consiguieron zafarle de la policía fue retenido y llevado dentro del cuarto donde se le retiró el abono y se le cogieron los datos para levantarle un acta, la cual pone simplemente que "se le echó del estadio y se le retiró el abono por soltar una carcajada delante de un funcionario". Esto dicho por el club en una reunión ayer con los afectados.
Poco a poco fue llegando más y más gente, incluidos los delegados de seguridad y el delegado del gobierno, única persona con la capacidad de mandar cargar a los nacionales.
La situación era muy tensa, todo el mundo estaba muy nervioso, los policías, los delegados y sobretodo los dementes, que vimos delante de nuestros propios ojos como pegaban con dureza a más de un compañero.
Peral y yo estábamos situados arriba de aquella puerta, junto a la mayoría de la demencia, y desde allí veíamos a otros dementes, entre ellos vedia que estaba grabando todo, aguantando la posición e impidiendo que cerraran la puerta. Comenzaron los cánticos de protesta.
Os dejo un video que han subido a youtube donde se ve un poco la situación, aunque en ese momento sólo habían cánticos, no se ven empujones ni nada. El video fuerte es el de vedia, el cual tengo en casa, y que espero poder mostraros un día de estos ya que es muy esplícito.
Poco a poco, y después de que hubiera pasado lo más fuerte, las cosas se fueron calmando un poco. La gente empezó a despejar la zona y de más.
Toda la Demencia, en señal de protesta, se fue del partido, dejando el sector demente totalmente limpio, imágen impactante que ha salido en muchos medios de comunicación.
Estuvimos fuera el resto del partido compartiendo crónicas y sucesos.
En esos momentos me llama mi padre, y me dice, "qué habéis hecho?". Él estaba escuchando Ondacero y habían dicho que la policía fue a desalojar un "peligroso" pasillo donde estaba la demencia y que cargamos contra ellos por lo que un policía cayó por las escaleras y que tuvieron que desalojar a toda la Demencia! Increíble. También tuvieron la poca vergüenza de decir que un demente se cayó por las escaleras y los nacionales fueron a ayudarle. Muchos medios han ido mintiendo sobre lo ocurrido, sobretodo las primeras horas siguientes al incidente, pero por suerte ahora muchos han "editado" las noticias publicadas o rectificado.
El balance final es que varios dementes tuvieron que ser atendidos y el chaval al que arrastraron escaleras abajo se lo llevaron al hospital en ambulancia para hacerle scanners y comprobar que no tuviera lesiones internas.
Al final del partido tuvimos la oportunidad de hablar con el delegado del gobierno quien nos confesó que era su primer día, al igual que el de los policías en ese estadio, y que todo se les fue de las manos.
Más tarde me enteré por Vedia que el mismo sábado por la noche el club estuvo revisando los videos de las cámaras de seguridad y que entonces harían una nota oficial con su postura. Como era de esperar, las imágenes nos dan la razón y el comunicado oficial es este:
http://clubestudiantes.com/frontend/clubestudiantes/noticia.php?id_noticia=3439&id_seccion=6&PHPSESSID=d071402c5bdc848ff2d2d5652aaa7ff1
http://www.marca.com/edicion/marca/baloncesto/acb/es/desarrollo/1179019.html
Bueno, no tengo mucho más que decir, hay mil detalles más que he ido leyendo, pero como no sé si han ocurrido realmente (agresiones y sucesos) prefiero no airearlos. Decir que de momento no se ha publicado el video que tiene vedia ya que se va a esperar un poco porque puede perjudicar a los implicados, pero dentro de unos días saldrá a la luz.
La próxima semana se juega en Zaragoza ante el CAI y seguramente hayan algunas pancartas y de más, pero la protesta fuerte será dentro de tres semanas en casa, ante el Fuenlabrada. Los Fuenlabrada Blues, afición del fuenla, ya ha ofrecido su colaboración para una protesta conjunta y de momento las ideas son variadas. Desde tirarle los abonos a la directiva pidiendo la dimisión de los responsables de seguridad, opción que dudo que suceda, hasta acudir al estadio con porras y chocolate caliente, burlándose irónicamente de lo sucedido, mucho más al estilo Demencia. Todo esto acompañado de pancartas del tipo " Menos porras y más porros" o "La violenta Demencia saluda a la pacífica Policía".
Decir también que la mayoría de las aficiones de baloncesto ACB y algunas LEB han mostrado ya su apoyo a la Demencia e incluso, la del Manresa apareció el domingo con esta pancarta en su partido.
Espero no haberos aburrido con esta extensa crónica, pero es que el tema daba para ello, sobretodo cuando se ha vivido tan cerca.
Saludos a todos
martes, 28 de octubre de 2008
viernes, 17 de octubre de 2008
Se sube el telón y... empieza la función...
Anoche me ocurrió algo gracioso, rozando lo absurdo.
Volvía a casa, me había bajado en la parada de la perla ya que venía de Madrid. Era la 1.20 de la noche, más o menos.
Cuando me acerco a la primera rotonda que hay en mi camino veo dos lecheras, paradas, con las luces encendidas,
y seis policías, todos mirándome. Yo, inevitablemente tengo que pasar por ahí, y veo como uno adelanta su posición
para encontrarse conmigo primero. Me quito los cascos, por si acaso me hablan, aunque pensaba que no ocurriría,
¿por qué iban a hacerlo? estoy acostumbrado a que siempre se me queden mirando, pero nada más. Finalmente sucede, el primer policía, el que se había adelantado acercándose a mi camino me habla, con distancia, cuando aún me faltaban varios metros para llegar a su posición.
-¿A dónde vas a estas horas?
Me lo dice con tono chulesco, casi suelto una carcajada. ¿Qué clase de pregunta es esa? ¿Acaso debo contestar? A ti que te importa me apetecía decirle.
-A casa -Respondo con tono de obviedad.
-¿Dónde vives?
Otra vez ese tono intimidador que seguro ha practicado en el espejo. Inevitablemente una sonrisa se me dibuja en la cara.
-En los villares
Cruzo a su lado y alcanzo a los demás policías mientras el primero se queda tras de mi. Prácticamente me rodean y adoptan posturas rudas y serias. Brazos cruzados y gestos de superioridad. La visión de ese ridículo espectáculo teatral provoca que mi sonrisa aumente. Me detengo, les miro, me miran, los seis, mi sonrisa no desaparece. Se ve que el hecho de que sus intimidatorias posturas me resultaran graciosas hizo que alguno se molestase y uno de ellos, medio enfadado, me pide la documentación. En ese momento una risilla se me escapa.
-¿La documentación? Claro.
Mientras la saco escucho a uno por detrás.
-Hombre, éste rumano, no es.
-¿De dónde eres?
Entre sonrisas
-No, rumano no soy. Soy argentino, pero llevo mucho aquí -y le entrego el DNI.
Por supuesto the show must go on. Otro de ellos se dirige a mi.
-¿Tú no tienes un coche rojo?
Casi me parto de risa
-No, no tengo coche.
-¿No te vi yo el otro día metiéndote por dirección prohibida?
El acabose, ahí ya no me pude resisitir y me reí.
-No, no tengo carnet si quiera.
-Claro, por eso viene en autobus -Agrega otro.
Jaja, voy en autobus porque soy un pobrecillo que no tiene ni carnet de conducir. En fin. El del DNI, tras inspeccionar varias veces cada cara del documento, por fin reacciona.
-¿Es correcta la dirección que aquí figura?
-¿Cuál pone? -Podría haberse dado el caso de que ni si quiera supiera que dirección ponía que él me la hubiera dicho y yo habría dicho que sí.
-Gaviota 16
-Es correcta
-Ten, todo bien.
-¿Estáis buscando algo?
-Sí claro, estamos buscando algo, por eso todo esto.
-Puedes irte -Agrega otro.
Oh gracias señor policía.
Finalmente me voy de allí, entre risas disimuladas y grandes carcajadas en mi cabeza. Fue demasiado surrealista. He intentado que notarais la atmósfera del momento porque realmente me pareció que se cumplieron tantos tópicos que la escena fue totalmente ridícula. Los seis maderos intentando intimidarme con sus posturas y tonos de voz y al ver que yo me mostré absolutamente tranquilo y sobretodo al ver que todo aquello me resultaba cómico por lo teatral que parecía, dieron un paso más, pidiéndome la documentación y amenazándome con que yo era el conductor que cometió una infracción días atrás. Sé que lo de la documentación y lo del coche rojo fue a causa de mi sonrisa porque se notó improvisado, nervioso. El tipo que me pidió identificarme lo hizo en plan ataque, como diciendo, a ver si así se te borra esa sonrisa.
De todas formas, no penséis que fui riéndome de ellos o algo así o que me parece ridículo que estén ahí buscando algo. Si quieres encontrar a un sospechoso lo normal es que estés atento y preguntes si tienes dudas, sobretodo en su caso, que no sabían muy bien lo que estaban buscando. Lo que me ha hecho tanta gracia y la razón de que escriba esto es la actitud de esos policías, que protegidos por su uniforme y posición intentaron mostrarse intimidadores conmigo, quiserion que les viera como superiores. Realmente se molestaron porque no me vieron acojonado y servicial. Sí agente, aquí tiene agente. xD. Me han pedido la documentación varias veces por Madrid, alguna de ellas en una situación parecida que no venía a cuento, por estar en el Retiro sentado simplemente, pero siempre se mostraron "profesionales" por decirlo de algún modo, sin querer molestarme y por supuesto sin pretender intimidar, simplemente demostraron que hacían su trabajo.
No sé, supongo que no es más que una razón más para meterme con Arganda, este gran pueblo que se cree ciudad donde hemos crecido. Y lo peor es que conozco a varios de los que se presentan a policía en Arganda, muchos de nuestra edad, alguno incluso compañero del colegio o del instituto, y os aseguro que el futuro no es alentador, parece que el que no sabe que hacer acaba de madero, lo malo es que algunos lo aprovechan para resolver algunas viejas rencillas.
Saludos a todos
Volvía a casa, me había bajado en la parada de la perla ya que venía de Madrid. Era la 1.20 de la noche, más o menos.
Cuando me acerco a la primera rotonda que hay en mi camino veo dos lecheras, paradas, con las luces encendidas,
y seis policías, todos mirándome. Yo, inevitablemente tengo que pasar por ahí, y veo como uno adelanta su posición
para encontrarse conmigo primero. Me quito los cascos, por si acaso me hablan, aunque pensaba que no ocurriría,
¿por qué iban a hacerlo? estoy acostumbrado a que siempre se me queden mirando, pero nada más. Finalmente sucede, el primer policía, el que se había adelantado acercándose a mi camino me habla, con distancia, cuando aún me faltaban varios metros para llegar a su posición.
-¿A dónde vas a estas horas?
Me lo dice con tono chulesco, casi suelto una carcajada. ¿Qué clase de pregunta es esa? ¿Acaso debo contestar? A ti que te importa me apetecía decirle.
-A casa -Respondo con tono de obviedad.
-¿Dónde vives?
Otra vez ese tono intimidador que seguro ha practicado en el espejo. Inevitablemente una sonrisa se me dibuja en la cara.
-En los villares
Cruzo a su lado y alcanzo a los demás policías mientras el primero se queda tras de mi. Prácticamente me rodean y adoptan posturas rudas y serias. Brazos cruzados y gestos de superioridad. La visión de ese ridículo espectáculo teatral provoca que mi sonrisa aumente. Me detengo, les miro, me miran, los seis, mi sonrisa no desaparece. Se ve que el hecho de que sus intimidatorias posturas me resultaran graciosas hizo que alguno se molestase y uno de ellos, medio enfadado, me pide la documentación. En ese momento una risilla se me escapa.
-¿La documentación? Claro.
Mientras la saco escucho a uno por detrás.
-Hombre, éste rumano, no es.
-¿De dónde eres?
Entre sonrisas
-No, rumano no soy. Soy argentino, pero llevo mucho aquí -y le entrego el DNI.
Por supuesto the show must go on. Otro de ellos se dirige a mi.
-¿Tú no tienes un coche rojo?
Casi me parto de risa
-No, no tengo coche.
-¿No te vi yo el otro día metiéndote por dirección prohibida?
El acabose, ahí ya no me pude resisitir y me reí.
-No, no tengo carnet si quiera.
-Claro, por eso viene en autobus -Agrega otro.
Jaja, voy en autobus porque soy un pobrecillo que no tiene ni carnet de conducir. En fin. El del DNI, tras inspeccionar varias veces cada cara del documento, por fin reacciona.
-¿Es correcta la dirección que aquí figura?
-¿Cuál pone? -Podría haberse dado el caso de que ni si quiera supiera que dirección ponía que él me la hubiera dicho y yo habría dicho que sí.
-Gaviota 16
-Es correcta
-Ten, todo bien.
-¿Estáis buscando algo?
-Sí claro, estamos buscando algo, por eso todo esto.
-Puedes irte -Agrega otro.
Oh gracias señor policía.
Finalmente me voy de allí, entre risas disimuladas y grandes carcajadas en mi cabeza. Fue demasiado surrealista. He intentado que notarais la atmósfera del momento porque realmente me pareció que se cumplieron tantos tópicos que la escena fue totalmente ridícula. Los seis maderos intentando intimidarme con sus posturas y tonos de voz y al ver que yo me mostré absolutamente tranquilo y sobretodo al ver que todo aquello me resultaba cómico por lo teatral que parecía, dieron un paso más, pidiéndome la documentación y amenazándome con que yo era el conductor que cometió una infracción días atrás. Sé que lo de la documentación y lo del coche rojo fue a causa de mi sonrisa porque se notó improvisado, nervioso. El tipo que me pidió identificarme lo hizo en plan ataque, como diciendo, a ver si así se te borra esa sonrisa.
De todas formas, no penséis que fui riéndome de ellos o algo así o que me parece ridículo que estén ahí buscando algo. Si quieres encontrar a un sospechoso lo normal es que estés atento y preguntes si tienes dudas, sobretodo en su caso, que no sabían muy bien lo que estaban buscando. Lo que me ha hecho tanta gracia y la razón de que escriba esto es la actitud de esos policías, que protegidos por su uniforme y posición intentaron mostrarse intimidadores conmigo, quiserion que les viera como superiores. Realmente se molestaron porque no me vieron acojonado y servicial. Sí agente, aquí tiene agente. xD. Me han pedido la documentación varias veces por Madrid, alguna de ellas en una situación parecida que no venía a cuento, por estar en el Retiro sentado simplemente, pero siempre se mostraron "profesionales" por decirlo de algún modo, sin querer molestarme y por supuesto sin pretender intimidar, simplemente demostraron que hacían su trabajo.
No sé, supongo que no es más que una razón más para meterme con Arganda, este gran pueblo que se cree ciudad donde hemos crecido. Y lo peor es que conozco a varios de los que se presentan a policía en Arganda, muchos de nuestra edad, alguno incluso compañero del colegio o del instituto, y os aseguro que el futuro no es alentador, parece que el que no sabe que hacer acaba de madero, lo malo es que algunos lo aprovechan para resolver algunas viejas rencillas.
Saludos a todos
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